20 abril, 2024

Para ciertos riesgos laborales son necesarias ciertas medidas de protección adicionales que ni la prevención técnica ni las disposiciones administrativas pueden dar. En esos casos es necesario aplicar una última línea de defensa, los EPP.

Los elementos o equipo de protección personal son todo dispositivo o medio que pueda llevar o disponer un trabajador, con la finalidad de que lo proteja contra riesgos que puedan amenazar su salud o seguridad. En Argentina (según Resolución 896/99) estos EPP deben tener una certificación por Marca de Conformidad, extendida por el organismo de certificación reconocido por la Secretaría de Industria, Comercio y Minería de la Nación, y acreditado por el OAA (Organismo Argentino de Acreditación).

Es la empresa la que debe otorgar la cantidad necesaria de EPP adecuados, capacitar a los trabajadores sobre su utilización correcta y controlar que se utilice efectivamente. La elección del equipo se debe realizar con ayuda de especialistas, como técnicos en Higiene y Seguridad, ya que es necesario conocer tanto lo relacionado a su eficacia como a sus propiedades ergonómicas, es decir, su adaptación a las características físicas y funcionales del trabajador para generar la menor incomodidad posible. Existen para las diferentes partes del cuerpo y forman una barrera protectora entre el cuerpo y el peligro, pero solo reduce el riesgo, no lo elimina por completo ya que aminora el daño en caso de un accidente. Algunas de las fuentes del peligro son por impacto, por químicos, por calor, por partículas, por ruidos potentes y por luz o radiación.

Los cascos de seguridad son los protegen la cabeza de posibles impactos, choques eléctricos o quemaduras.   Deben utilizarse durante todas las actividades de trabajo ajustado al mentón con las correas correspondientes.

Se usa protección para los oídos cuando el ruido en el lugar de trabajo excede los niveles permitidos, las personas expuestas deben utilizar protectores auditivos. Existen dos tipos de éstos, los tapones que se insertan en el conducto auditivo externo, y las orejeras que van alrededor de la cabeza y absorben el ruido ambiente.

Para la cara, los protectores de ojos se utilizan contra proyección de partículas, líquidos, humos, vapores, gases y  radiaciones pero sólo cubren la zona ocular. En tanto, los protectores faciales, protegen los ojos pero también el resto del rostro, protegiéndolo de rayos ultravioletas o infrarrojos (en el caso de soldadores) y de otros cuerpos extraños como plástico transparente, cristal templado o rejillas metálicas.

Para las vías respiratorias existen distintos tipos de respiradores que de acuerdo al filtro que poseen, ayudan a proteger al trabajador de determinados contaminantes presenten en el ambiente tales como, polvos, neblinas, vapores orgánicos o gases.

En cuanto a las extremidades inferiores en ciertos tipos de trabajo el calzado de seguridad es fundamental, ya que protegen de la humedad, de sustancias calientes y de caída o golpes en superficies peligrosas e inestables. Para proteger las piernas de salpicaduras de metales fundidos, se deben utilizar polainas de seguridad resistentes al calor.

Los trabajadores que realizan labores prolongadas bajo los rayos ultravioletas, deben aplicarse protector solar cada dos horas y utilizar vestimenta que cubra la piel expuesta a la radiación para evitar quemaduras de diversos grados en la dermis.

Por último, cuando el riesgo es generalizado y elevado, para proteger la totalidad del cuerpo, se utilizan distintos elementos dependiendo del tipo de trabajo que se realice. Para aquellos que se ejecutan en altura, se deben usar cinturones o arnés de seguridad enganchados a una línea de vida. En tanto, aquellos trabajadores que estén expuestos a sustancias corrosivas, a altas temperaturas o a radiaciones, deben utilizar vestimenta con tecnología adecuada que impida el contacto directo.

Mediante el control constante del estado material de los EPP y la capacitación adecuada  e integral de todos los trabajadores que deben usarlos, se reduce mucho el daño parcial y permanente que pueden adquirir. La responsabilidad  es de todos.

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