29 marzo, 2024

Frederick Winslow Taylor  fue un ingeniero  y economista de EEUU, es conocido por sus estudios de la organización científica del trabajo y es considerado el padre de la Administración Científica por el libro que escribió sobre este tema.

Taylor estudio varios principios para mejorar  el trabajo. Postuló “Aumentar la especialización y la división del trabajo para hacer más eficiente el proceso”.

Taylor establece principios y normas que permiten obtener un mayor rendimiento de la mano de obra y ahorro en los materiales; apoyándose en aspectos como estudio de tiempos y movimientos, selección de obreros, métodos de trabajo, incentivos, especialización e instrucción.

Una de las consecuencias del estudio de tiempos y movimientos fue la división del trabajo y la especialización del obrero.

Cada obrero pasó a ser especializado en la ejecución de una única tarea o de tareas simples y elementales

La especialización extrema del obrero facilita la selección, el entrenamiento y la supervisión del personal. A partir de ahí, la intensa división del trabajo contribuye a facilitar la ejecución de la tarea.

Considero que la forma de organizar las tareas a través de la especialización extrema no es necesariamente un aumento de eficiencia.  Por otro lado me parece bien la rotación de puestos.

El intervalo de tiempo que se permanece en un mismo puesto o tarea puede ser desde menos de una jornada de trabajo hasta varios meses. Conviene que los propios interesados participen en esta iniciativa de cambio y aporten su parecer respecto del intervalo de rotación.

Las claves de la satisfacción laboral según diversos estudios realizados sobre la satisfacción, el rendimiento y la variedad de tareas, se encuentra en el contenido del trabajo. Normalmente, se considera que cuanta mayor sea la preparación para el puesto de trabajo, mayores son los niveles de satisfacción en el trabajador.

Sin embargo, la percepción que cada uno tiene sobre su trabajo es la que determina las sensaciones positivas o negativas hacia el mismo.

Actualmente las organizaciones buscan el bienestar mental de sus empleados.

Para eso contratan servicios de psicología laboral.

Los psicólogos ofrecen un conocimiento cuantitativo del rendimiento del empleado a través del conocimiento de sus procesos básicos (atención, memoria, funciones ejecutivas, velocidad de procesamiento, resolución de problemas), lo cual servirá para tener una aproximación de la forma en que el individuo toma decisiones y se desempeña en sus funciones.

Para analizar y mejorar los procesos laborales los psicólogos utilizan varias herramientas.

Una de ellas es la Ergonomía Cognitiva, “es una disciplina científica de carácter multidisciplinar, que estudia las relaciones entre el hombre, la actividad que realiza y los elementos del sistema en que se halla inmerso, con la finalidad de disminuir las cargas físicas, mentales y psíquicas del individuo y de adecuar los productos, sistemas, puestos de trabajo y entornos a las características, limitaciones y necesidades de sus usuarios; buscando optimizar su eficacia, seguridad, confort y el rendimiento global del sistema” según la  Asociación Internacional de Ergonomía (IEA).

Otra herramienta que utilizan los psicólogos son las evaluaciones neurocognitivas, es un procedimiento que permite saber el funcionamiento cognitivo de una persona. Para llevar a cabo esto se realiza una entrevista previa a cada empleado y después de un análisis se brindan los resultados finales. Estas evaluaciones permiten mejorar el desempeño de cada empleado.

Otro procedimiento que utilizan los psicólogos para encontrar el bienestar del personal es la evaluación del clima laboral, se evalúa el desempeño del trabajador lo cual permite observar las habilidades y actitudes del mismo para poder relacionarlos con los requerimientos de la tarea productiva esperada por la empresa.

Por otro lado pueden analizar el clima ambiental y mejorar las condiciones que le generan estrés a los empleados.

Para que estos tengan un buen pasar por la empresa es necesario realizar capacitaciones permanentemente. La función de la capacitación es mejorar el presente  y ayudar  a construir un futuro mejor para tener más fuerza de ventas y que el trabajo este organizado. Las continuas capacitaciones deben estar enfocadas a la misión, visión y valores de una empresa.

Por otro lado las empresas deben respetar la Ley de Trabajo N° 20.744. Si no lo cumplen el empleado se puede dar por despedido por ejemplo que el empleador cambie las condiciones de trabajo o modifique las remuneraciones perjudicando al empleado.

Según la Ley de Trabajo, la violación del límite de jornada establecido generará la obligación del empleador de abonar el salario correspondiente. Según el Art. 203 de esta Ley explica que el trabajador no estará obligado a prestar servicios en horas suplementarias, salvo casos de peligro o accidente ocurrido o inminente de fuerza.

El Art. 201. menciona que el  empleador deberá abonar al trabajador que prestare servicios en horas suplementarias un recargo del cincuenta por ciento (50%) calculado sobre el salario habitual y del ciento por ciento (100%) en días sábado después de las trece (13) horas, domingo y feriados.

Art. 204. explica  que queda prohibida la ocupación del trabajador desde las trece (13) horas del día sábado hasta las veinticuatro (24) horas del día siguiente, salvo en los casos de excepción previstos.

La jornada de trabajo íntegramente nocturna no podrá exceder de siete (7) horas según el Art. 190. Y según el Art. 197 entre el cese de una jornada y el comienzo de la otra deberá mediar una pausa no inferior a doce (12) horas.

Según lo que plateaba Taylor en su libro,  considero que no es conveniente para una empresa segmentar a los empleados y delegar una sola función. La rotación de puestos es necesaria para la motivación del empleado.

Para que la empresa gane rentabilidad es necesario descubrir las habilidades de cada empleado. Por ende los psicólogos ofrecen continuas herramientas para descubrir esto.

La jornadas de trabajo también tienen que estar reguladas por la ley. Las exigencias laborales no es un beneficio para las empresas.

Si un empleado renuncia genera más gastos a la empresa y un nuevo desafío de reemplazar a ese empleado.

Por ende no es conveniente que un empleado esté en condiciones indignas.

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